Después de cinco días de una búsqueda desesperada, la familia de Federico Bruni, el joven argentino que se perdió en la selva de Brasil, confirmó que lo encontraron muerto. “Perdón por no llegar a tiempo”, lamentó Daniela, su hermana, en redes sociales.
Bruni, que estaba desaparecido desde el lunes 27 de enero, fue hallado a orillas de un río en Sao Bonifacio, en el estado de Santa Catarina. Era de Munro, tenía 32 años y había llegado a Florianópolis en diciembre pasado.
“Gracias Fede por ser mi hermano. Te amo hoy y siempre. Perdón por no llegar a ttiempo. Te amo, te amamos. Siempre juntos. Estamos acá”, escribió Daniela, su hermana, en Instagram, debajo de una vieja foto de Federico sonriendo dentro de una camioneta.
Poco después, Daniela compartió una historia en la misma red social que señalaba que “la búsqueda terminó”. “No es el desenlace que esperábamos. Frenen la viralización y por favor dejen de contactar a Dani. Muchas gracias a todos por su ayuda”, dice el mensaje que replicó la hermana de Federico.
Ese lunes Federico se había contactado por última vez con su familia. En esa charla les contó que iría a pasar unos días a un camping en el que no habría buena señal. Por eso no les sorprendió la ausencia de noticias del joven durante algunos días.
Estaba en Brasil desde fines de diciembre. Ya había ido varias veces al país y solía internarse en zonas selváticas y pueblos aislados, pero nunca había visitado el lugar en el que finalmente fue encontrado su cuerpo.
La familia de Federico había viajado este viernes a Brasil, después de que el jueves la contactaran desde la Policía brasileña para informarles del hallazgo de la camioneta, sus pertenencias y su perra, junto a un río.
Como detalló Clarín, el río sobre el que se encontró la camioneta desemboca en la selva, por lo que una posibilidad que manejaban era que estuviera en su interior después de haber sido arrastrado por la corriente del río.
Finalmente la policía local encontró a Federico a orillas de ese curso de agua.