La justicia federal inició una investigación por una presunta amenaza de tiroteo en la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco, sede Comodoro Rivadavia.
La denuncia se realizó en las últimas horas, en relación a un episodio que habría ocurrido el 16 de mayo, donde presuntamente se difundió un mensaje a través de un canal de difusión de WhatsApp, generando preocupación entre estudiantes, docentes y toda la comunidad académica.
“En el mensaje podría leerse que había alguien que iba los días lunes al aula magna y que llevaría un arma en la mochila. El arma sería propiedad de su papá, según indicaba la persona”, dijo Maite Ortega, delegada zonal de la universidad.
Foto: archivo ADNSUR
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“Esta persona dijo que algún día podía ponerse nervioso y que podía empezar a “sacudirle” a la gente por gusto”, explicó la referente en diálogo con Canal 9.
Según explicó, el mensaje fue difundido a través de un canal de difusión de WhatsApp de la universidad. “Es un canal muy discriminador, que hostiga, tiene comentarios muy agresivos. Quienes publican lo hacen de forma anónima y en él ponen lo que quieren”, manifestó Ortega.
“En la última hora del viernes, yo tomé conocimiento con la secretaria académica de la Universidad de Ciencias Naturales, que me puso al tanto, y el viernes ya hicimos otras comunicaciones con otras personas de la universidad”, explicó en relación a la cronología del episodio.
“El día lunes conectamos toda la información, se sabía que había circulado el mensaje, pero no sabíamos cuál era el canal de comunicación. Ahí encontramos el canal de difusión, del que yo ya tenía referencias. Con todas estas pruebas, el día martes a la mañana concurrí a la Policía Federal y realicé la denuncia correspondiente como delegada zonal”, confirmó.
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La delegada comentó que tras la denuncia no se suspendieron las clases, y desde el sector académico se encuentran trabajando “acompañando a docentes y estudiantes para que no se sientan intimidados”.
“Las personas quieren ir a estudiar y trabajar a la universidad y no a sentir miedo. Desde la fiscalía siguen trabajando y desde la universidad, en el servicio de seguridad, también tienen consideraciones particulares.”
Mientras se desarrolla la investigación correspondiente, la delegada indicó que se encuentran realizando tareas en el interior del ámbito académico, conversando con docentes y estudiantes para generar confianza.