En diálogo con Canal E, Carlos Fara, analista político, analizó el clima previo a las elecciones y sostuvo que “todo va a quedar en el plano de la incertidumbre si el Gobierno no toma decisiones claras”.
Una campaña intensa y un final abierto
En la recta final hacia las elecciones, Fara describió un panorama político y económico tensionado. “Tenemos un gobierno que está tratando de que no se desbarranque la situación de los mercados y el tema del dólar”, afirmó. Según explicó, el Ejecutivo está enfocado en controlar la volatilidad mientras lidia con declaraciones que desestabilizan, incluso desde el exterior. “Trump quiere ayudar, pero le genera más problemas al Gobierno que otra cosa”, señaló.
Fara sostuvo que, pese a las tensiones, la alianza oficialista podría ser la más votada por estar presente en los 24 distritos. Sin embargo, matizó ese posible logro: “Probablemente sea la que tenga más votos, pero sería una victoria pírrica, con cierto sabor a poco”.
Sobre el impacto que tendrá el resultado en los mercados, Fara anticipó diferentes escenarios. “Cualquier cosa por debajo de los 35 puntos va a generar ruido de vuelta, ruido que no va a ser fácil de calmar”, aseguró. En contraste, “habría un shock de optimismo si el gobierno se acerca al 40%”, aunque consideró esto poco probable.
Mercados, gabinete e incertidumbre política
La expectativa está puesta en cómo reaccionarán los mercados tras el domingo. “Si se confirma una victoria acotada del oficialismo, puede haber una reacción relativamente tranquila. Pero todo dependerá de las expectativas previas”, explicó.
Otro factor que suma tensión es la posibilidad de cambios en el gabinete, una medida que el propio presidente mencionó pero luego relativizó. Fara criticó esa ambigüedad: “Lo que escribió ayer con la mano, hoy lo borró con el codo. Y eso sí genera incertidumbre”, afirmó. También anticipó que algunos ministros dejarán sus cargos, como Mugullo, Petri o Adorni, pero no está claro quiénes los reemplazarán ni con qué perfil.
“Algunos cambios va a haber, aunque más no sea por el hecho de que hay ministros con un proceso más agotado”, remarcó Fara, pero advirtió que el efecto positivo depende de cómo se comuniquen y ejecuten. De lo contrario, la semana post electoral podría estar marcada por interrogantes sin respuesta.
En ese sentido, concluyó: “Hasta que el Gobierno termine de tomar decisiones durante la semana que viene, eso va a generarle dolores de cabeza”.