En las instancias grandes, siendo la más reciente Roland Garros, hay una figura que no está apareciendo: Alexander Zverev (3°), que en este 2025 levantó el ATP 500 de Múnich y poco más. Pero, ¿a qué se debe su mal momento?
Desde muy pibe, Sascha fue visto como un tenista con potencial para ganar un Grand Slam. Estuvo cerca en varias ocasiones (tres, para ser exactos), pero no pasó de eso: cayó frente a Dominic Thiem en la final del US Open 2020, Carlos Alcaraz en la de Roland Garros 2024 y Jannik Sinner en la del Australian Open 2025.
Nole sacó a Zverev este miércoles. (EFE)
Una de las cosas que se le reprochan a este gigante de 28 años es su falta de autocrítica: se le hizo muy común en la gira de polvo de ladrillo europea excusarse y echar culpas a factores externos. ¿Es tan así? A hacer un repaso…
Las excusas de Zverev tras cada derrota
Después de la final del Abierto de Australia en la que cayó ante Sinner, Sascha aceptó su derrota y admitió la superioridad que impuso el tano sobre él. Pero esa fue una de las últimas veces en las que le reconoció el triunfo al rival en un post-partido…
Zverev estuvo a un pasito de levantar el Abierto de Australia en enero. (EFE)
En la gira sudamericana, disputó el ATP 250 de Buenos Aires y el ATP 500 de Río y cayó en los cuartos en ambas competencias, contra Francisco Cerúndolo y Francisco Comesaña, respectivamente. Posteriormente, empezaron las excusas. Sobre el torneo argentino, dijo que no pudo competir al 100% por una intoxicación, y en Brasil le echó la culpa al calor y la humedad…
Luego, en Acapulco, otra vez fue derrotado sorpresivamente, esta vez en la segunda ronda ante Learner Tien. “Muchos jugadores se enfermaron en Acapulco. Había superado un partido difícil (ante Matteo Arnaldi en primera) y podía llegar lejos. Pero esa noche me golpeó, igual que a varios de los otros chicos”. Otra vez, no fue por su nivel, sino por un malestar en su cuerpo.
Zverev, con poco filo en la gira. (REUTER)
En el Sunshine Double -como se conoce a los Masters de Indian Wells y Miami- y en Montecarlo, el alemán pudo ser autocrítico y admitir los errores que cometió en la gira: “Estoy perdiendo muchos partidos en los que estaba en posición de ganar. Tengo que cambiarlo“. Después de eso, levantó el ATP 500 de Múnich y parecía que podía remontar en su gira de polvo de ladrillo, pero no fue así y volvieron las explicaciones…
En Madrid cayó nuevamente contra Cerúndolo en octavos, y esta vez su queja fue por una decisión del umpire: el juez le convalidó un ace a Fran que provocó la molestia de Zverev. Desde ahí, perdió la cabeza y el partido, y al final del encuentro usó ese momento como excusa.
Cerúndolo fue verdugo del teutón dos veces en 2025. (AP)
La semana siguiente, en Roma, perdió frente al local Lorenzo Musetti, al que tildó de ser demasiado defensivo: “Juega igual siempre en esta superficie (Musetti), depende de errores del rival”. Además, se quejó de las pelotas que les dio la organización. “Las pelotas fueron un desastre, demasiado grandes. No podía conectar golpes ganadores, la pelota no salía despedida”, reclamó.
Antes de llegar a Roland Garros, Sascha fue a probar su nivel en el ATP 500 de Hamburgo, como local absoluto y primer preclasificado, pero fue eliminado en segunda ronda ante Aleksandar Kovacevic. Esta vez, después del encuentro declaró: “Vomité 37 veces y tuve 39,4 grados de fiebre a la noche“, aunque agregó que “no es una excusa”.
Sascha, de muchas frustraciones en esta temporada. (REUTER)
El miércoles, Novak Djokovic (6°) lo eliminó de Roland Garros por 4-6, 6-3, 6-2 y 6-4 y nuevamente culpó a las condiciones climáticas. “Hacía mucho frío, eso hizo que la velocidad de mi saque no fuera especialmente alta“, dijo tras su encuentro con Nole, siendo que su saque es uno de los más temidos del circuito.
El alemán, sobrado de talento… y de excusas. (AP)
Lo próximo en el calendario de Zverev
Al alemán le toca dar vuelta la página, llevarse lo bueno de la gira y pensar en la competencia en césped. Para arrancar, tendrá la chance de empezar a hacerse fuerte doblemente como local, en el ATP 250 de Stuttgart -del 9 al 15 de junio- y en el ATP 500 de Halle -del 16 al 22 de junio-. Después, competirá en Wimbledon buscando levantar su primer Major.
“No quiero terminar mi carrera siendo el mejor tenista de todos los tiempos que nunca ganó un Grand Slam. Haré todo lo que pueda para terminar alzando uno de esos trofeos”, decía Zverev después de perder con Sinner a principio de año. El talento no le falta, y demostró que tiene las capacidades y virtudes de juego necesarias para levantar un Grand Slam. No hay excusas…
Sascha deberá ponerse a tiro para pelear en Wimbledon. (EFE)
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