La procrastinación es un comportamiento común en la sociedad actual que afecta a muchas personas y detiene su accionar diario generando estrés y afectando los niveles de productividad al postergar las tareas importantes. Con el avance de la Inteligencia Artificial, es posible acceder a información y soluciones prácticas respaldadas por estudios científicos y psicológicos que buscan combatir este perjudicial hábito. En este caso, la IA identificó las mejores estrategias basadas en dichos estudios.
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1. Microacciones
Una de las principales razones de la procrastinación es que el cerebro humano percibe las tareas como demasiado grandes, complicadas y abrumadoras, por lo tanto, las evita. Para que esto no suceda la IA, basada en la psicología conductual, recomienda dividir una tarea grande en pequeñas acciones que se puedan llevar a cabo. De esta manera, cada microacción que se complete brindará una sensación de logro por lo que aumentará la motivación y reducirá la percepción de bloqueo. Por ejemplo: en vez de leer un capítulo de un libro o novela por día, la IA recomienda leer una hoja cada jornada.
2. Menos motivación y más acción
Cuando el ser humano quiere evitar emociones negativas como el estrés o la ansiedad es cuando entra en acción la procrastinación. La IA sugiere una técnica utilizada en la terapia cognitivo-conductual (TCC) llamada principio de activación conductual, el cual sugiere que la acción precede a la motivación. Esto quiere decir que en lugar de esperar a estar listo o preparado, según la IA, se debe comenzar. Sin embargo, la autocompasión es un ingrediente importante en este camino ya que de acuerdo a un estudio realizado por la Universidad de Carleton en Canadá, las personas que se perdonan por procrastinar tienden a mejorar dejando de a poco ese hábito. La autocrítica severa perpetúa el ciclo de la procrastinación.
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3. “Comerse la rana” utilizando la técnica Pomodoro
“Comerse la rana” es un método popularizado por el escritor Brian Tracy, que impulsa a realizar la tarea más difícil o temida al comenzar el día. De esta manera, se desarrolla la sensación de logro temprano que incentiva a continuar con el resto de las responsabilidades. Además, la técnica Pomodoro podría ser de gran ayuda para mantener la concentración sin llegar al agotamiento. Dicha técnica consta de intervalos de 25 minutos con pausas de 5 minutos, lo que ayudará a evitar la fatiga mental mejorando la eficiencia, como por ejemplo: al estudiar.
4. Establecer metas SMART
Para un efectivo avance es crucial definir metas claras y para ello existe él metodo SMART el cual aconseja que los objetivos sean Específicos (Specific), Medibles (Measurable), Alcanzables (Achievable), Relevantes (Relevant) y Temporales (Time-bound). Si las metas cumplen con esos criterios las tareas podrían ser concretas y manejables, según la IA.
5. Las distracciones digitales
En la era digital las distracciones están a un clic de distancia: notificaciones constantes, aplicaciones, redes sociales interrumpen el flujo de trabajo y fomentan la procrastinación. De acuerdo con la IA, la multitarea digital reduce de forma significativa la productividad, es por ello que bloquear o limitar el tiempo que los individuos pasan frente a las pantallas es esencial para notar cambios. Chat GPT recomienda el uso de aplicaciones como Freedom o Cold Turkey que regulan el enfoque durante las horas más productivas.
AT / Gi