La crisis en la obra social de los militares detonó un fuerte malestar con la gestión de Luis Petri. La aparición de casos puntuales como el que publicó LPO la semana pasada generaron un efecto rebote que amenaza con continuar.
El primer paso lo dio Gabriela, la esposa del suboficial Martín Salazar, un militar en actividad de la Armada Argentina, donde cuenta la gravísima situación de abandono que atraviesa su familia luego de que el IOSFA rechazara parte del tratamiento prescripto por los especialistas médicos.
En el relato, Gabriela denuncia la delicada situación de su esposo que fue diagnosticado el año pasado de cáncer de colon. “Fue tratado de forma exitosa y en uno de los controles este año nos dicen que la enfermedad volvió con metástasis que no era posible operar. Nos presentamos en la obras social on todos los papeles para hacer un tratamiento especial y de los 5 medicamentos solo nos podían cubrir tres”, detalla la mujer.
Un Capitán de Navío afirmó a LPO que “aparecieron otras señoras pero de capitanes de navío los que suelen ser más mesurados que los suboficiales. Ahora IOSFA les piden a los afectados que hagan recurso de amparo. Es una vergüenza”.
La esposa de un suboficial de la Armada denunció que la obra social no le cubre el tratamiento oncológico
Este militar que está muy compenetrado con la situación de IOSFA alerta sobre otro movimiento interno que pone a Petri en el ojo de la tormenta. “Se acaba de romper el huevo del que puede nacerle un cisne negro a Petri. Los suboficiales de la Armada y del Ejercito comienzan a levantar la voz por el destrato que sufren”.
“Mientras que a los altos mandos que tienen alguna dolencia los derivan a sanatorios privados a la perrada se le hace más difícil recibir un tratamiento no originado por lesión derivada de operaciones o entrenamientos militares”, agrega.
Aparecieron otras señoras pero de capitanes de navío los que suelen ser más mesurados que los suboficiales. La cosa es que ahora desde el IOSFA les piden a los afectados que hagan recurso de amparo
En este marco, advierte que “comienza a incubarse la idea de una protesta puertas afuera de los cuarteles, algo que sin lugar a dudas hará ruido”. La marcha se daría a las puertas del IOSFA.
La obra social viene sufriendo un fenomenal ajuste que incluye la eliminación de los aportes para militares retirados que en muchos casos no pueden afrontar la compra de medicamentos y tratamientos médicos.
La familia del suboficial Salazar de la Armada Argentina hace un pedido desesperado ante la negativa de IOSFA de cubrir su tratamiento oncológico.
La Obra Social de las Fuerzas Armadas y de Seguridad se encuentra bajo la órbita del @MinDefensa_Ar, a cargo de Luis Petri. pic.twitter.com/1xQfzNTKL4— Pablo Sebastián Giles (@pablosgilesok) August 8, 2025
LPO reveló en exclusivo que en junio, el ministerio de Defensa le pidió un préstamo de 40 mil millones de pesos al Instituto de Ayuda Financiera para Pagos de Retiros y Pensiones Militares (IAF) para el desarrollo de sistemas informáticos, comprar equipo médico de alto costo y mejorar el funcionamiento.
Mientras que a los altos mandos que tienen alguna dolencia los derivan a sanatorios privados a la “perrada” cada se les hace mas difícil recibir un tratamiento no originado por lesión derivada de operaciones o entrenamientos militares
Sin embargo, no hubo ninguna inversión en ese sentido y se terminó pagando deuda. Una fuente que formó parte de la discusión asegura que se dio cuenta de eso y en “el IAF hay bronca porque mintió el argumento para el cual pidió esos 40.000 millones”.
El IAF quedó a cargo de Francisco Adorni tas una intervención directa de Karina Milei, como reveló en exclusivo LPO, tiene a su cargo el pago de unos 300.000 retiros y pensiones a personal de las Fuerzas Armadas y realiza inversiones en el mercado financiero para el otorgamiento de préstamos, principalmente destinados a viviendas.
El vaciamiento de la obra social de los militares afecta a los pacientes oncológicos que no consiguen medicamentos
IOSFA tiene 550 mil afiliados y es una de las cinco obras sociales más grandes del país. Por eso, dentro de las fuerzas denuncian la intención de “meter mano en la caja” y avanzar en la privatización, como anticipó LPO en julio del año pasado.
En las fuerzas hablan de una tormenta perfecta que combina los malos salarios y la crisis de la obra social que puede terminar con una expresión pública de malestar que complique la gestión de Petri.